PROCESO DE FORMACION

Proceso de formación del niño. 

Cuando el ser humano nace una parte de su cerebro está sin desarrollar "no está ocupado" pero sí existe una extraordinaria capacidad para aprender y adquirir todo aquello que le transmiten las condiciones de vida y la educación. Todos los sentimientos superiores del hombre son aprendidos desde la más tierna infancia; por eso, los primeros años son decisivos en la formación de la personalidad.

Los niños

Los niños tienen características y necesidades propias que varían inclusive con la etapa, ya se trate de un lactante, un preescolar, un escolar o un adolescente. Durante los primeros años el niño aprende con facilidad, adquiere hábitos diversos y los cambios se suceden con rapidez, de tal forma que el pequeño de hoy es muy distinto al que se observó ayer y al que se observará mañana.

El recién nacido

El niño recién nacido es tan indefenso, que no puede ni levantar la cabeza y solamente se comunica con quienes le rodean a través del llanto; depende totalmente del adulto y sin la atención de este muere en pocas horas. Durante esta etapa el niño duerme casi todo el tiempo y permanece despierto solo por algunos minutos, cuando tiene hambre frío o cualquier otro problema.
A veces se dice que hay que dejar llorar al bebé en su cama, sin cargarlo para que no se acostumbre a los brazos. Esto no es correcto porque cuando el bebito llora hay que acercarse y observar que le ocurre, es posible que esté mojado, tal vez tenga frío o mucho calor por excesos de abrigos; hay que cargar al bebé, además porque este necesita sentir afecto y seguridad por medio del abrazo amoroso de sus padres, quizás algunos crean que los niños cuando son pequeños no saben de cariño ni de cuidados.
Esta creencia es totalmente errónea pues la vista y el oído del recién nacido comienzan a funcionar desde el primer día de nacido aunque de manera imperfecta.

El lactante

Cuando el lactante está sentado puede ver todo lo que le rodea y a mayor distancia, inclusive. El gateo desarrolla la fuerza muscular y prepara para una actividad decisiva: la marcha. Cuando el niño comienza a caminar inicia una etapa de independencia. Esto ocurre alrededor de los 12 meses.
Es fundamental que se le deje mover, que aprenda a caminar. Los riesgos de golpes y caídas son inevitables, aunque se tomen precauciones. Siempre hay que hacer frente a estas posibilidades y no evadirlas por medio del corral o la cuna.
Hay que ayudar al bebito a que desarrolle todas las capacidades y habilidades a su debido tiempo.
El bebito en sus primeros 6 meses recibe lactancia materna exclusiva, luego come los alimentos pasados por la batidora o el colador después se les darán aplastados o picados para que se acostumbre a sentir los grumos en la boca.

Etapa transicional

Cuando el niño se habitúa durante el primer año a tomar los alimentos muy licuados en un biberón rechaza y hasta vomita, la comida cuando se le da en otra forma.
El uso de la cucharita es muy importante para el niño; también lo es el conocer los sabores de los alimentos. Cuando el niño alrededor de 10 meses; debe comenzar a tomar en jarrito, a utilizar la cuchara y coger el pan o galleta con sus manos.
Es natural que la coordinación de los movimientos al principio sea deficiente y que parte del alimento caiga fuera de la boca. Por otra parte cuando un niño no desea comer es inútil y contraproducente obligarlo a que lo haga por medio de amenazas y castigos. Es inútil que la mamá adopte posturas lastimeras, la abuela mire al cielo y el papá se ponga bravo. Nada dará verdaderos resultados porque el niño cada día será más inapetente, además, la insistencia actúa como un reforzador de la falta de apetito, con un resultado muy negativo para el niño.
No es correcto anunciarle al niño que lo mejor de la casa es para él aunque sea así, hay que expresarles que todos tienen derechos: abuelita por ser la más viejita, y papá y mamá porque trabajan mucho. El niño debe de conocer que toda la familia tiene que alimentarse.
El momento de sentarse a comer debe de ser agradable, nada de disputas ni bravezas. Si el niño no desea comer, no importa, los demás si lo harán con placer.

Escolar

El niño debe aprender a vestirse y desvestirse, a utilizar el cepillo de dientes, a bañarse y valerse por sí mismo. Al principio con ayuda, luego solo; alrededor de los 5 ó 6 años lo hará bien. En ocasiones el niño se pone los zapatos al revés, o se deja sucio el cuello o las orejas, o mete las dos piernas en la misma pata del pantalón y, a pesar del error, reclama que lo dejen solo, "que él sabe". Esto indica que quiere ser grande y que está aprendiendo; solo se le debe ayudar un poco y el resto que lo haga el propio niño.
El niño escolar se caracteriza por su dinamismo y demuestra lo que aprendió en las etapas anteriores.

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